La antigua tradición considera a san Judas Tadeo gran hacedor de milagros.
Es el patrón de los casos más difíciles, desesperados e imposibles, de las causas perdidas. Es invocado para socorro de todo tipo de necesidades y problemas, pues ofrece gran consuelo y asistencia cuando se está desalentado, deprimido o triste y se tiene el corazón oprimido por la angustia y la tristeza.
Si se acude a él con fuerte confianza e inquebrantable fe, y se persevera mucho en la oración, siempre concede su ayuda poderosa.
ORACIÓN MUY EFECTIVA
Glorioso San Judas Tadeo, Apóstol y mártir, pariente y amigo de Jesucristo al que seguiste con entrega, noble defensor de la fe y gran predicador del Evangelio. Hombre grande en la virtud y prodigioso auxiliador nuestro que siempre nos das el refugio que con afán buscamos. Hoy con ferviente fe a ti acudo implorando me atiendas, en ti confío plenamente y te pido desesperadamente me tiendas tu siempre generosísima y milagrosa mano y no permitas que siga padeciendo por más tiempo.
San Judas Tadeo, siervo fiel del Señor, aclamado en todo el mundo por conceder grandes favores, desde el lugar que ocupas merecidamente en la Gloria abre mis caminos al amor, a la dicha sentimental, haz que alcance éxito y triunfo en la dificultad y encuentre la forma de recuperar a la persona que amo.
Por el poder de Dios y en nombre de nuestro Señor Jesús, por la Santísima Virgen María y por los Ángeles y Santos te ruego que se cumpla lo que en esta oración pido, dame santo amigo un rayo de esperanza, dame fueras para seguir luchando y no perder la ilusión. San Judas Tadeo, patrón de las causas desesperadas, milagroso abogado nuestro ante la adversidad, solicito de ti tu intercesión en mi angustioso problema, necesito que la persona que amo y que se llama ……. vuelva a mi lado, enamorado-a, arrepentido-a, queriendo ser mi pareja y empezar de nuevo, sin egoísmos, sin infidelidades, sin rencores ni orgullos, que me pida matrimonio, formar un hogar, que ambos sanemos las heridas recibidas y nos entendamos, nos queramos, respetemos y amemos como una vez no hace tanto tiempo lo hicimos. Amo a profundamente a ……. y no quiero perderle-la, te ruego que ……. me de una señal de su acercamiento, que me tenga en sus pensamientos en todo momento, que me sienta en su corazón como yo lo-la siento y no desee estar con nadie que no sea yo ……. Te ruego santo querido te dignes ser mi mediador, pide por mí y haz que renazca en el-ella su amor por mí qué no pueda vivir sin mí y sueñe conmigo, que se olvide de la persona que nos separó ……. y sienta enormes deseos por verme y estar junto a mí, san Judas Tadeo, en especial solicito me ayudes en: (decir ahora lo que se desea conseguir). Lo que te pido es desesperado y casi imposible pues la distancia y otros graves asuntos nos separan, pero sé que tú puedes hacer que se haga realidad, ya que acoges bajo tu amparo a los desesperados, eres poderoso bienhechor a quien Dios no le niega nada y atiendes muy efectivamente las peticiones imposibles.
Sí el-ella volviera a mi pronto, mi buen san Judas, seria la persona más feliz del mundo, no dejaría de agradecer a nuestro Señor Jesús el favor concedido y el amor que me demuestra y tú estarías por siempre en mi corazón y oraciones. San Judas Tadeo, esplendido benefactor, ahora que tanto preciso de tu asistencia, no me dejes, por tu poder y misericordia te suplico con todo mi ser no tardes en darme el alivio que deseo y busco, haz glorioso santo que mis penas se vuelvan gozo. Así sea.
Rezar tres Padrenuestros, tres Avemarías y tres Glorias. Repetir la oración y los rezos tres días seguidos, o nueve, como una novena, si la petición es muy urgente. Es conveniente prender alguna vela de color verde o blanco cualquiera de los 3 días, dejándola sin apagar hasta que se consuma del todo.